martes, 8 de marzo de 2016

Raul López y otros jugadores que hacen grande al baloncesto


Ahora que se retira Raúl López (O Raül, que no me queda claro, y ahora para liar más la cosa, el jugador se pone en su camiseta el apellido materno, Molist). Pues eso, ahora que se retira López, debo decir que para mi ha sido una de las estrellas por las que vale la pena ver o pagar la entrada de un partido de baloncesto. 

Salvando las distancias, físicas, un océano por medio o más bien poco dinero: no he tenido la suerte de poder ver en una cancha a los más grandes para mi, Magic Johnson, Larry Bird, Michael Jordan o ahora Stephen Curry (tampoco cuando han venido a jugar a España o Europa)... los jugadores, (Fernando Martín aparte, al que le debo un artículo), que más me han impactado en una pista de baloncesto (y a los que por circunstancias más he podido seguir) han sido:

Jordi Villacampa (1963, Reus, Tarragona). Uno de los jugadores con más velocidad de los que he visto en directo. Es algo que no se aprecia tanto en la televisión, la rapidez. Pues bien, Villacampa ejecutaba sus movimientos en la cancha, aparte de sus fundamentos con una celeridad ciertamente impresionante. Y al juntarse con una legendaria generación de canteranos del Joventut de Badalona, como los hermanos JofresaFerrán Martínez o Morales, la Penya fue campeona de España y de Europa. Hoy en día es el presidente de su club de toda la vida. Con la selección española mantiene marcas como la de más puntos en un partido (48).


Jordi Villacampa en otra foto de la mítica revista Gigantes del Basket

Serguei Babkov (1967, Novosibirsk, Rusia). Ya le dediqué un artículo, pero vuelvo a escribir sobre él. Por su clase, era un jugador que marcaba las diferencias. Tenía una parada impresionante en carrera y en fundamentos no se quedaba atrás, un buen salto con un tiro en suspensión poco ortodoxo pero efectivo. Una delicia ver jugar a Babkov. Yo tuve la suerte de vivir en Málaga mientras el jugador ruso estuvo en la plantilla del Unicaja de Málaga, en unos años decisivos para el crecimiento del club de la Costa del Sol (sub-campeón de Liga ACB y primera participación en Euroliga).



Jorge Garbajosa (1977, Torrejón de Ardoz, Madrid) Decisivo para conseguir Copa (2005) y Liga ACB (2006) en su etapa en el Unicaja de Málaga. Y fundamental en el Mundial de Japón que ganó España en 2006, especialmente cuando se lesionó Pau Gasol. Marcaba las diferencias en ese año 2006. Garbajosa se salía de la competición FIBA, hacía lo que quería y por ello se fue a la NBA, al equipo de los Toronto Raptors. En USA también destacó hasta que se lesionó gravemente en un tobillo. Personalmente considero que ya no alcanzó semejante nivel tras dicho percance, aunque participó activamente en gestas de la selección española (su equipo como él dice), como la plata olímpica de 2008 en Pekín o el oro del Eurobasket de 2009 en Polonia. 



Sergio Rodíguez (1986, Santa Cruz de Tenerife) Si Villacampa tenía la velocidad de ejecución el "Chacho" tiene el ojo más rápido para ser el inductor del juego de su equipo. Ve pases que nadie ve, se cuela por donde nadie lo haría, es una auténtica gozada verle en acción. Tiene un gran dominio del bote bajo (como Curry) y además cada vez es más letal en el tiro. Merece la pena ir al Palacio de los Deportes de Madrid para ver jugar al nejor representante del baloncesto que Pablo Laso ha instaurado en el Real Madrid de estos años gloriosos.

José Manuel Calderón, Sergio Rodríguez y Garbajosa en la NBA
En cuanto a Raúl López (1980, Vic, Barcelona), la primera vez que lo vi en una cancha en vivo fue en Málaga en un partido con el Joventut, en cuya prolífica cantera había terminado de formarse. En aquella temporada (y tras el Mundial Junior de 1999) ya se presumía que iba a marcar una época, pero poco le duró al conjunto de Badalona. Los verdinegros le traspasaron al Real Madrid por una cantidad muy importante (sobretodo para su modesta economía) y pronto se ganó a la afición blanca, hasta que en su segunda temporada se rompió la rodilla y empezó un calvario con las lesiones que marcó su carrera. 


Siempre recordaré ese fatídico partido  en 2002, encima amistoso, de preparación de la selección española contra Rusia, donde se volvió a romper la rodilla. Considero que no se le cuidó lo suficiente, teniendo en cuenta que acababa de reaparecer y todavía se estaba recuperando de la primera lesión. Es mala suerte, claro, pero muchas veces los entrenadores, en este caso, Javier Imbroda son muy impacientes y demasiado exigentes. 

Lo mismo pasó con Garbajosa, que forzó su recuperación para reaparecer con la Selección Española en el Eurobasket de 2007 y luego tuvo una necrosis en su tobillo lesionado, que tuvo que operarse de nuevo. Creo que Pepu Hernández, el seleccionador en esa ocasión tenía que haberle parado los pies al jugador

Volviendo a  López, el de Vic estaba sin equipo en ese momento, ya que había decidido dar el salto a la NBA y había rescindido su contrato con el Madrid. Menos mal que los Utah Jazz, con los que todavía no había firmado, fueron unos caballeros y cumplieron su palabra, a pesar de la lesión. 

En el caso de Garbajosa, los Toronto Raptors rescindieron su contrato por la comentada y forzada reaparición con España que le costó una nueva operación. Aunque se cuestionara a los primeros doctores, yo creo que ese sobre-esfuerzo por llegar al eurobasket pudo tener algo que ver en la recaída. Veremos ahora con la lesión de Marc Gasol y los juegos de Río de Janeiro.

Tengo un amigo que en aquella época dijo que porqué no se había lesionado Paraíso en vez de Raül López... jajajaja. En el fondo y siendo políticamente incorrecto respecto a José Antonio Paraíso, con todo el mérito que tuvo este jugador, estoy de acuerdo en la cuestión: Porqué se tienen que lesionar los jugadores buenos. 


A pesar de ello era mucha la clase que atesoraba Raül, otro genio en el puesto de base con un gran dominio del juego, y un muy buen tiro que exhibió y demostró allí donde ha jugado, NBA incluida. Considero también que fue un gran fallo (de Ettore Messina, de lo que ya escribí, en este caso) no haberle renovado, cuando tenía un año más en su contrato, en su segunda etapa en el Real Madrid. Intercalando grandes momentos en la selección española, tanbién estuvo en Rusia, Gerona y Bilbao, donde se despide y van a poder apreciar sus últimas lecciones de aquí a final de temporada. Ver aquí los mejores momentos de López.














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